Unidad y humildad
(Salmo 133:1) «!!Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía!»
Se da cuenta usted de cuán estrechamente están unidas la unidad y humildad. La una da lugar a la otra; ninguna puede existir sin la otra. Son como gemelas siameses, perpetuamente conectadas. Personalmente, he visto numerosas ocasiones cuando el orgullo ha ganado (aun cuando se lo llama así) y la armonía se ha desvanecido . . . y quiero decir muy rápido. . . .
Contrario a lo que usted tal vez lea hoy, las palabras luchas y pelea no son aptas descripciones de la manera de salir adelante. En última instancia ellas no glorifican a Dios. Los amigos se hacen al nopelear y al rehusarse a luchar.
Comprométase a dejar libres a otros para que ellos puedan crecer y descubrirlo por cuenta propia. Para cambiar, tanto como sea posible, aléjese de una discusión antes que invitarla. Sea más pacificador.